Ejemplos de estilos de mezquitas
Si nos atenemos a su estructura y a la tectónica hay dos tipos básicos de mezquitas: la de Oriente y la de Occidente. Las diferencias fundamentales derivan de la asimilación de las técnicas y formas constructivas del Imperio Bizantino, en el Mediterráneo Oriental, y de la basílica Occidental.
La mezquita de Oriente tiene una planta central, con cúpula sobre pechinas que descarga su peso sobre pilares y lo deriva a través de bóvedas de cuarto de esfera hasta los pilares, muros y contrafuertes exteriores; generalmente suele tener alminares de base circular y por parejas (dos, cuatro o seis) y predomina el arco ligeramente apuntado.
La mezquita de Occidente tiene una planta longitudinal (que recuerda la basilical) con naves orientadas hacia la qibla sustentadas por columnas en el interior y por el muro exterior. El alminar único tiene una base cuadrada y los arcos predominantes son los de herradura.